Primer Informe

Sábado 25 de agosto de 2007

Mi campaña fue un acto repetido de meditación y reflexión, de reafirmación de creencias y convicciones, de acercamiento al ciudadano y de convivencia respetuosa con mis adversarios; ella presentó al pueblo una opción política distinta, con tesis, propuestas y conceptos claros de la tarea legislativa y de la profunda connotación del servicio público y ofreció, en conclusión, soluciones reales y concretas a los problemas que, en lo estructural y como innegable realidad, enfrenta el pueblo de México.

Indudablemente fue este el factor decisivo que me dio la confianza, muy bien razonada, del electorado de mi Distrito que se identificó más con la campaña sencilla y de frente a él, lo que hizo posible obtener el triunfo en los comicios federales el domingo 2 de julio de 2006.

El rescate de la credibilidad ciudadana hacia partidos, instituciones y gobierno, así como la dignificación de la política a través del trabajo legislativo, fueron mis tesis centrales en un proceso electoral que siempre reconocí habría de marcar el antes y el después en la historia contemporánea de nuestro país

En ese tenor, y cierto de los retos y disidencias se sustentan en el  distanciamiento existente entre el Estado y el ciudadano, he realizado una intensa campaña que no acaba el 2 de julio; ahí apenas inicia una etapa más y decisiva en busca de la consolidación del proyecto del Partido Acción Nacional y del Presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa.

 

Un esfuerzo desde el Congreso que va por tí y es por tí

En nuestro Grupo Parlamentario sabemos que profesamos diversidad de opiniones pero nos une la convicción de privilegiar lo que es más importante para los ciudadanos que representamos. Como legisladores, estamos comprometidos con lo que creemos. Es así que en el Distrito 04 del Estado de Michoacán, con cabecera en la histórica ciudad de Jiquilpan, he estado pendiente de esta reflexión seguro de la importancia de actuar en apego a la realidad que acá se vive.

Recorridos, reuniones de trabajo, atención permanente en la Oficina de Enlace Ciudadano, han sido el mecanismo ideal para ser consecuentes entre lo que se dijo en campaña y lo que ahora, como temas centrales, hago desde la LX Legislatura del H. Congreso de la Unión.Estoy cierto de que la única manera de no matar la esperanza ciudadana es dando la cara a ella de manera permanente y, a la vez, como integrante del Poder Legislativo, trabajar de la mano en múltiples proyectos donde el ciudadano se sienta incluido y tomado en cuenta.

Ese ha sido el espíritu que, en lo distrital, ha marcado mi trabajo donde hemos resuelto ya un total de 240 de 270 gestiones recibidas quedando pendientes algunas que requieren de procesos administrativos mas complejos. Por ello fue necesario crear un Consejo Consultivo, grupo plural integrado  por  catorce

ciudadanos de probada vocación de servicio y experiencia política en distintas corrientes ideológicas que coadyuva en al análisis, seguimiento y resolución de las inquietudes ciudadanas.

La labor de gestión se ha extendido a la generalidad del Estado de donde hemos recibido y resuelto ya un buen número de planteamientos, que han solicitado mi intervención, que van desde atenciones en materia de salud, educación, trámites administrativos, impartición de justicia, repatriación de cadáveres, rehabilitación de carreteras y vías públicas como en  Cotija y 

Pátzcuaro, así como apoyos económicos a instituciones públicas y ciudadanos en lo particular.

Al interior de la Cámara de Diputados, he estado siempre atento a los llamados de mi Grupo Parlamentario y de las comisiones que integro. En la Comisiónde Relaciones Exteriores he podido compartir importantes experiencias con mis compañeros legisladores de los   diversos   grupos   diversos 

grupos parlamentarios, alternar con el cuerpo diplomático acreditado en nuestro país, plantearme desde la tribuna para manifestar nuestra postura frente el multicitado tema de la construcción del muro fronterizo y, en el pleno de la comisión, dar el posicionamiento del Partido Acción Nacional en el primer encuentro con la canciller Patricia Espinosa Cantellano; de  igual forma  participé en la Reunión

del Comité Ejecutivo de la Confederación Parlamentaria de las Américas en la ciudad de Los Angeles, California del 21 al 24 de junio de 2007 y previo a ella realicé una gira en varias ciudades de los Estados de California y Nevada con el objeto de encontrarme con organizaciones de migrantes, clubes de servicios, contratistas, empresarios y medios de comunicación. 

Del 4 al 8 de julio integré la delegación mexicana que asistió a la IX Reunión Interparlamentaria México-Cuba, realizada en la ciudad de La Habana.

En apego a la encomienda de la Comisión de Asuntos Indígenas, de la cual también  formo parte, he tenido innumerables encuentros en la Meseta Tarasca y en la Zona Mazahua-Otomí del oriente de mi Estado; a la fecha, hemos organizado a un grupo numeroso de mujeres indígenas dentro de una Asociación Civil denominada “Manos Indígenas Creadoras de La Cañada, A.C.” con sede en la comunidad de Huancito.     Por  unanimidad,   en   el   seno  de   la  Comisión  

se aprobó mi propuesta de crear la Subcomisión de Atención a Tradiciones que buscará responder a ese reclamo generalizado de nuestros pueblos indígenas de no perder su esencia y raíz.

Asimismo, y fiel a mi tesis educacional que apoya la idea de inducir ya nuevas formas de creer para hacer posibles las nuevas formas de actuar, pude presentar el 27 de marzo de 2007, ante el Pleno de la Cámara de Diputados, mi Iniciativa de Reformas y Adiciones al Artículo 38 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, que busca  hacer  copartícipes  a  los 

partidos políticos de la importante educación cívico-política del ciudadano mexicano; ella forma parte de un importante conjunto legislativo que se encamina, precisamente, en el sentido de ser consecuente con la tesis propuesta en el sentido de encontrar los mejores caminos para hacer que el Estado cumpla de manera eficaz su rol frente al ciudadano de nuestros tiempos.

La cultura ha sido también un reto fundamental. Por ello hemos procurado promover, bajo la consigna “Preservando nuestros Valores Culturales”,   varias

manifestaciones artísticas con muestras pictóricas y artesanales haciendo resaltar el trabajo de las mentes creadoras que han estado en el anonimato; esta será una labor permanente que bien habrá de dar frutos importantes sobre todo por la motivación que ha sido capaz de infundir en los participantes. Literatura, danza y artes plásticas serán los entornos sobre los que habremos de avocar este importante esfuerzo.

“Manos en Acción” es el grito de guerra con el que, con contrariedades y sin ellas, sigo de frente al ciudadano que creyó en mi partido y en mi persona; no hay momento para treguas; la acción política requiere que las cosas se hagan lo mejor posible; porque estoy seguro, parafraseando a Manuel Gómez Morín que “el bien mal hecho es peor que el propio mal porque mata la esperanza, en cambio el solo mal alienta a combatirlo”. “Manos en Acción” será entonces el programa permanente que me ocupará de cumplir en el lapso de tres años con esa intención que un día me motivó a buscar ser diputado y a tener la enorme responsabilidad y satisfacción de representarte en el H. Congreso de la Unión.