[190] LOS RETOS ACTUALES DE LA EDUCACION ANTE LA GLOBALIZACION
Parte I
Felipe Díaz Garibay
Semanario “Tribuna” de Sahuayo, Michoacán, México, domingo 31 de octubre de 2010.
Nada más preocupante en nuestros días como el enterarse, el conocer, el constatar que el sistema educativo de varios países del planeta, y muy especialmente el de México, atraviesa por la calle de la amargura. Y no vamos a ir muy lejos, es claro que el atraso que se vive hoy en día bien nos ubica ya en un lugar nada halagador dentro de los estándares internacionales.
No pocas han sido las veces en que me he referido al tema educativo, bien podría enumerar múltiples entornos en los cuales he podido hablar del tema y mi conclusión ha sido clara: México como muchos otras naciones del mundo, necesitan una profunda reforma educativa que se traduzca en la más profunda reforma política de todos los tiempos. Y es que destacados tratadistas políticos han hablado ya, hasta hoy, de las profundas desventajas que arrastra consigo la democracia cuando ella carece de bases claras y firmes que solo es capaz de darle la educación.
Lamentable, bajo todo concepto, resulta observar las temáticas en las aulas en los niveles básicos, temas como el civismo, la lengua nacional, la historia, no tienen la esencia que exige y reclama los tiempos actuales. El niño, el puberto, el adolescente, caminan carentes de símbolos importantes y trascendentes, y sólo ellos pueden otorgarles la identidad que a esas edades debe quedar perfectamente delineada.
Podría hablarse de múltiples factores que afectan el entorno educativo en nuestros días y, no pocos hacen referencia al asunto de la globalidad.
De cuantas cosas me percato en mi ir y venir entre familias, instituciones educativas, instituciones gubernamentales, partidos políticos, organizaciones sociales y grupos de interés.
Pero es necesario tocar el punto desde sus raíces, sin saltar tan pronto a las conclusiones.
1. Los contextos globalizadores.
La globalización es un proceso continuo y dinámico, que desafía las leyes de los países en su forma de regular el funcionamiento de empresas y el comportamiento económico de los individuos a nivel internacional que, si bien pueden dar trabajo a la mano de obra desocupada o ser los contratados, también pueden beneficiarse de irregularidades y debilidades subsistentes en un determinado país.
Es un proceso económico, tecnológico, social y cultural de gran escala, que consiste en la creciente comunicación e interdependencia de los distintos países del mundo unificando sus mercados, sociedades y culturas, a través de una serie de transformaciones sociales, económicas y políticas que les dan un carácter global.
La globalización ha transformado la forma en que las empresas llevan a cabo sus organizaciones sus operaciones, pero sobre todo, ha tenido un impacto muy importante en la organización misma.
En nuestro país hoy en día no es suficiente contar con estudios de licenciatura, para ser competitivo, es necesario especializarse, conocer las estrategias internacionales, dominar varios idiomas y estar abierto a oportunidades de empleo. Pero pocos lo entienden de esa manera, es mas los mismos esquemas educativos lejos de avanzar no hacia un control de calidad, sino a una calidad total, poco han podido hacer hasta ahora. No existe ni la actitud como tampoco la aptitud y de ello vemos las consecuencias.
La formación de bloques económicos complementan y no obstruyen el proceso de globalización, la apertura de los mercados y la liberación de flujos de capital iniciaron un movimiento entre cada bloque y se ha extendido gradualmente. Esto ha transformado la realidad del sector productivo a nivel mundial, las empresas, como motor de cada economía, modifican la forma de llevar a cabo sus operaciones a fin de adaptarse al nuevo entorno, muchas naciones luchan por ganar un aposición en el contexto internacional o al menos cierta presencia geopolítica en sus regiones. El proceso no es nada sencillo.
Considerando todo lo expuesto, es necesario retomar como eventos de gran impacto dos procesos de tipo histórico: el auge, decadencia y caída del Imperio Español, con una duración de 406 años aproximadamente y el proceso de efervescencia revolucionaria, cuya duración es de 201 años, iniciado por la Revolución Francesa, seguido por la Revolución Industrial, la Revolución de Octubre en Rusia, los movimientos de liberación en América y África que culmina con el derrumbe del Campo Socialista, que por pertenecer a la Historia Moderna y Contemporánea, permite disponer de fechas concretas de inicio y fin: la llegada a América de Cristóbal Colón en 1492, la Revolución Francesa en 1798, la culminación del dominio colonial de España en América en 1898, y el inminente derrumbe del socialismo iniciado entre 1989-1991.
Los efectos de la globalización son de carácter positivo y negativo, según el punto de vista de quien lo juzgue.
Para sus defensores todo son aspectos positivos: aumento de la competencia, reducción de los precios, llegada de capitales a los países subdesarrollados, evita la emigración forzosa, y favorece el crecimiento económico. Frente a estos aspectos positivos, son numerosos los autores y movimientos sociales que señalan aspectos negativos.
Modifica las relaciones sociales a favor de los más poderosos y del capital, en perjuicio del trabajador, sobre todo del no cualificado. Ello agudiza los procesos migratorios desde los países pobres a los más desarrollados.
Se acostumbra a decir que el rendimiento de las empresas privadas resulta “siempre” superior al de las empresas públicas, aun cuando sobre esto habría mucho que discutir, ya que ello dependería del sector elegido, de las organizaciones de dirección y gestión en uno y otro caso y de la fase en que se encontrara el producto con respecto al ciclo de maduración del mismo.
El modo en el que se realice esta privatización resulta de enorme importancia, hasta el punto de que, en muchos casos, puede llegar a absorber esa pretendida ventaja de la privatización, convirtiéndola finalmente en algo negativo para la sociedad.
Se comete, a menudo, el error de pensar que al llevarse a efecto una privatización, el mercado por sí solo y rápidamente será capaz de cubrir cualquier desajuste. Olvidándonos del hecho de que muchas actividades estatales surgen de la incapacidad de los mercados para facilitar ciertos servicios o industrias esenciales.
Y es así que, en efecto, el debate ahora se circunscribe en elegir entre el Estado o el Mercado. Hay quienes de manera vehemente defienden al Mercado olvidando sus inequidades y pasan de largo el hecho de que el Estado debe existir justo para regular y amortiguar las profundísimas desigualdades que lleva consigo el proceso productivo del Mercado. Son temas que a simple vista para muchos resultan intrascendentes, pero es preciso conocer el fondo para entender los efectos. (Continuará).♦